VALDEPEGAS
ORGANIZACIÓN: MONTEROS DE ENCINASOLA.
Localidad: Encinasola (H).
Fecha: 16/10/2016
P: 47
RH: 14
Cupo: Libre
Tipo Finca: Abierta
Nº Has. Monteadas: 700 ha.
Resultado: V: 09 J: 12 C: 14
GRAN TIROTEO Y DEMASIADOS FALLOS
Con la venida del día, comenzaba el goteo de asistentes llegando al Hotel de Encinasola, donde Paco Borjano y Hugo Larrubia habían dado cita a sus monteros, para cazar en este segundo día de temporada particular la finca de nueva incorporación de Valdepegas.
Esta finca era toda una incógnita, ya que no se había cazado en montería desde hacía mas de quince años. Es una finca con muchas ondulaciones de terreno y valles que van a morir a la ribera del Murtiga.
Se cerró con cincuenta puestos de los cuales fueron ocupados finalmente cuarenta y siete. La noche anterior se hizo corta y algunos monteros no acudieron a la cita por la mañana.
Tras las indicaciones de Paco Borjano, se guardó un minuto de silencio y se rezó un Padre Nuestro por los monteros fallecidos. Tras esto, dio comenzó el sorteo.
Como siempre y para agilizar, se realizó por armadas que fueron saliendo inmediatamente.
El primer cierre en salir, el que montaban Pirri y Rafita, divisó un tremendo venado de 18 puntas que se adentraba en el cazadero cuando llegaban a la altura del puesto de David Suviri, de Málaga.
Poco a poco se fue cerrando lo mas sigilosamente posible la mancha, con la noticia de que el venado estaba dentro.
La suelta, se produjo pasadas las once y media y fue nada mas soltar, cuando los perros dieron con el venado divisado, empujándolo hacia las puertas, que misteriosamente no lo vieron.
Fue en este momento, tras la suelta, cuando la montería alcanzó su momento álgido, produciéndose lances por doquier y disparos alocados que no perdían intensidad.
Mas de tres cuartos de hora duró el tiroteo a los cochinos, que tenían sus encames muy próximos a las sueltas de Saina, Francis, Los Cadenas y Carlos Rubio.
Poco podían hacer esos perreros ante tanta res.
Manolo “Piano”, contaba por la emisora que aquello se asimilaba mas a un cercón que a una finca abierta.
Los conductores de las rehalas no avanzaban en la mancha, esperando la vuelta de los perros que perseguían las reses en todas direcciones. El comienzo de la montería se tornó de locura, y se empleó demasiado tiempo en emprender la mano para empujar hacia las posturas, las cuales, atizaban de lo lindo. Sobre todo, las dos traviesas del Barranco Hondo.
Al terminar la montería, se habían contado un total de 268 disparos, repartidos por toda la mancha. Aunque, la caza, no estuvo repartida por igual. La parte mas alta, misteriosamente estaba mas aburrida, y las reses y cochinos estaban concentradas en la parte mas baja, lugar que se había escogido para la suelta.
Finalmente, el calor pasó factura, los perros, cansados por las incesantes carreras, vinieron a menos, pero, aún así, con los perreros ya en los carros, seguían sacando cochinos.
El resultado, desmereció lo allí acontecido, y es que, además del calor, los monteros no anduvimos finos, ahí me incluyo yo mismo, que jugué seis lances, cobrando solamente dos jabalíes.
Sobre las tres y media, se retiraban los monteros a la comida. Allí, por ser domingo, el personal se fue retirando mas rápidamente de lo habitual, y el plantel mostró un total de 9 venados, destacando dos muy buenos, de los cuales uno se puede meter en el bronce y 12 jabalíes, con tres buenas bocas entre ellos.
La montería terminó como caracteriza a Monteros de Encinasola, con el mejor ambiente posible, con una tertulia relajada, contando lances los que tuvimos la suerte de jugarlos, y aguantando las mofas de los que escuchaban de nuestra boca los fallos.
Otra montería caracterizada y marcada por el calor, en este arranque de temporada para este grupo andaluz.
Fte: Carlos Casilda Sánchez.
