EL PEZUELO
ORGANIZACIÓN: SAFARIS & MONTERÍAS
Localidad: Fuencaliente-CR
Fecha: 19-1-19
P: 40
RH: 22 (15 se presentaron)
Cupo: Libre
Tipo Finca: Cercada (2.000 has)
Nº Has. Monteadas:
Resultado:
V: 13 ( 2 destacados)
J: 6 ( 1navajero)
H: 23
CRÓNICA de la Montería:
FRÍO y FALLOS EN EL PEZUELO
Convocaba Safaris y Monterías a sus monteros el pasado 19 de enero para dar la mancha El Pezuelo, en Fuencaliente.
Mañana muy fría, plomiza y amenazante de lluvia que intentamos capotear con unas buenas migas con torreznos, chorizo, pimientos y sardinas fritas que nos sirvió el restaurante del Hotel El Azor, y que nos metieron en faena y nos calentaron el cuerpo.
La jornada comenzó con un inesperado y “doloroso” contratiempo para la organización, pues no compareció en la junta un grupo de cazadores ucranianos que tenían confirmada asistencia a la montería y que dejaron colgados 4 puestos al organizador y el importe de los mismos en el limbo. A eso tuvo que sumarle poco después la no comparecencia de 5 rehalas que estaban avisadas, lo que mermó la fuerza canina notablemente, ya que de 22 rehalas previstas sólo pudieron soltar 17 finalmente en aquellos duros y agrestes cerros.
Haciendo de tripas corazón, porque esto no es de recibo, Juan García realizó el sorteo con apenas 40 monteros, teniendo el detalle de desdoblar a algunos de sus clientes para aumentar las posibilidades de triunfo de una montería que ya empezaba más fría de lo normal.
Con los monteros en la mancha, al intenso frío y el aire que soplaba en las zonas altas de aquellas sierras, se le sumó una llovizna que de forma intermitente aparecía para dar aún mayor sensación de helor a los sufridos monteros, que ya no sabían que prendas ponerse para combatir la gélida temperatura.
La montería fue de menos a más, empezando muy floja y con poco ruido de rifles para entrar en buena dinámica pasada la una de la tarde, donde con los perros en el corazón de la mancha, el tiroteo fue intenso y prolongado, animando mucho la mañana hasta pasada las dos y media, en el que empezó a menguar. A las 14:45 h de la tarde, habiendo yo tirado sólo un zorro en todo el día, le envié un mensaje al organizador felicitándolo por la montería, pues tiros había escuchado para que hubieran más de 50 reses sobre el cemento. Hablaban de más de 350 disparos, no los conté, pero tiros hubo para tener luego un buen resultado sobre el cemento, aunque es cierto que estos no estuvieron bien repartidos, pues armadas como la Serreta o Las Nieves lo único que pegaron fueron tiritones.
Si se divirtieron de lo lindo por Los Pinos y El Sopié, La Minilla y parte de Perea, así como por otras zonas de la mancha como los primeros puestos del Camino, por donde se vació una tropa de más de 20 cochinos según cuenta el montero del nº 1.
Recogidas las rehalas y con los monteros en la comida reponiendo fuerzas y recuperando la temperatura corporal, lo que más se escuchaba eran fallos y lances con reses pinchadas, que por la dificultad de la orografía y el tiempo desapacible, los monteros habían errado o desistido de pistear. Se corroboró esta realidad cuando en la junta sólo aparecieron 9 venados, 5 jabalíes y 17 ciervas.
Al día siguiente continuaron las labores de pisteo por parte de la guardería y se encontraron otras 11 reses en los puestos que habían comentado a la organización la existencia de reses posiblemente abatidas. Seis reses se encontraron en la armada del Sopié ( 3 venados y 3 ciervas), 1 jabalí apareció en Los Pinos, dos reses de momento se han encontrado en Perea, pues se está buscando un buen venado que pinchó Francisco Crespillo, y hay varias reses que buscar en otras zonas de la mancha. Una pena que todas estas reses, y las que faltan por cobrar, no se hubieran presentado en la junta de carnes, porque el trabajo de guardería y organización, y el tiroteo que se escuchó durante la segunda mitad de montería, no se corroboraron con el plantel que se arrimó.
De las reses que pudimos ver en la junta destacar dos bonitos venados abatidos por Julián López y Emilio Jiménez, que cobró gracias al gran trabajo de Juan el Guarda Mayor, y un navajero abatido por Luis Martínez.
Esperemos que en la montería del 16 de febrero que queda por dar en la finca nos podamos quitar el sinsabor que nos deja el no ver reflejado en el plantel el tiroteo que tuvimos, y que los jabalíes se sumen a la fiesta y cumplan en los puestos para disfrete de los monteros . Que así sea. Allí nos vemos.
Todomonteria. com