Estimados monteros,
Se aproxima el otoño, y con ello las primeras monterías de nuestro calendario se encuentran a la vuelta de la esquina. Muchísimas horas en el campo, muchísimas horas de oficina, inversiones, esfuerzo, trabajo y dedicación puestos en estas jornadas monteras.
Mucha ilusión se respira en el ambiente por parte de los monteros que vienen a cazar con nosotros.
Uno mismo se va dando cuenta al tratar con la gente que no solo es ilusión, sino también son sueños, sueños de los que solo entendemos nosotros, los cazadores, y los que nos gusta el campo.
Por otro lado, también esos sentimientos se dejan notar, en este caso, en el seno de nuestra organización conforme pasan los días, cada vez que visitamos las manchas, cada vez que comprobamos que, el trabajo bien hecho, siempre aparece, trabajo que llevamos realizando sin pausa desde que finalizó la pasada temporada.
Por tanto, pienso que son esos sueños para los que nuestro equipo (orgánicos, rehaleros, secretarios, postores, guías, arrieros, catering, ayudantes, etc) debe trabajar y responsabilizarse.
Nos damos cuenta día a día que no solo estamos trabajando para nuestros clientes, sino que también estamos trabajando, a la par, para nosotros mismos, y que mientras más sea así, mejor. Al fin y al cabo estas ilusiones deben ir de la mano y encaminadas hacia un mismo objetivo, el objetivo de que se cumplan los sueños de nuestros clientes.
Clientes que ya en este segundo año que nos acompañan dejan de serlo, para convertirse en amigos, y que con el tiempo, dejarán de serlo también, para convertirse en una gran FAMILIA, que es de lo que trata la caza en general, y la MONTERÍA en particular.
Desde el equipo R.R.B. Servicios Forestales y Cinegéticos, les mandamos un fuerte abrazo a todas aquellas personas que nos ayudan cada día, y a aquellas que nos confían sus sueños en esta dura, ilusionante, y seguro que gratificante temporada que se nos presenta.
A todos os deseamos una ¡FELIZ TEMPORADA!
Nos vemos en el monte.